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miércoles, 12 de junio de 2019













Consecuensias  del razonamiento del lenguaje 


La lectura es una forma de adquirir conocimientos, de aprehender cierta información a partir de un código. Para el ser humano, el código por excelencia es el lenguaje. A partir de la lectura de ciertos símbolos, el lector aprehende conocimientos, los traduce en información dentro de su mente, los decodifica. El código posee un soporte que puede ser visual, auditiva .Leer implica saber pronunciar las palabras escritas, identificarlas y comprender su significado. A nivel textual, leer es poder comprender un texto y extraer su significado. Las personas que leen con mayor regularidad, y adquieren lo que se conoce como hábito de lectura, son beneficiados con diversas ventajas. En primer lugar estas personas enriquecen su mundo interior, lo que les permite comprender el mundo externo de mejor manera. Alguien que lee adquiere más conocimientos e incrementa su capacidad comunicativa.

 Las palabras ayudan no sólo a comprender mejor las cosas sino también a hacernos comprender mejor con los otros.Por otro lado, leer ayuda a desarrollar nuestra capacidad de análisis y resolución de problemas, ya sea a nivel intelectual, práctico, en la vida diaria o laboral. Por otro lado, también es una opción de entretenimiento para aquellos que eligen la lectura de ficción en vez de realizar otras actividades como mirar televisión o navegar en Internet. Para que el proceso de lectura sea posible, varios aspectos se ponen en juego.
La lectura es el proceso de comprensión de algún tipo de información e/o ideas almacenadas en un soporte y transmitidas mediante algún tipo de código, usualmente un lenguaje, que puede ser visual o táctil (por ejemplo, el sistema braille). Otros tipos de lectura pueden no estar basados en el lenguaje tales como la notación o los pictogramas.También se le puede dar el significado como una de las habilidades humanas para descifrar ya sean letras o cualquier otro idioma que esté o no inventado por el hombre.

La lectura como un proceso

En primer lugar la cuestión física, ya que es necesario el movimiento ocular y la fijación de la vista para leer. Además, se producen varios procesos internos dentro de nuestra mente. Cuando leemos, lo que hacemos es visualizar las palabras. Luego, se produce un proceso de fonación (consciente o no) en que la lectura pasa al habla y audición que pasa al oído. Finalmente, la cerebración entra en juego para que la información llegue a nuestro cerebro y podamos comprender.Aprender a leer es un proceso que comienza en una edad muy temprana, entre los cinco y seis años en la escuela primaria. Aprender a leer abre las puertas de la educación y la escritura que es otro proceso importantísimo en la formación intelectual de una persona. Lamentablemente, aún existen en el mundo millones de personas analfabetas que pierden acceso al conocimiento del mundo.Hay distintos tipos de lectura posible, que se adaptan a las necesidades del lector. Una lectura profunda requiere mayor concentración y atención, así como un trabajo intelectual más intenso. Una lectura rápida, por el contrario, busca detectar las partes más destacadas de un texto y no profundizar. Una lectura de repaso supone una lectura previa de análisis, como puede ser una relectura de un texto ya leído      


La lectura es una forma de adquirir conocimientos, de aprehender cierta información a partir de un código. Para el ser humano, el código por excelencia es el lenguaje. A partir de la lectura de ciertos símbolos, el lector aprehende conocimientos, los traduce en información dentro de su mente, los decodifica. El código posee un soporte que puede ser visual, auditiva .Leer implica saber pronunciar las palabras escritas, identificarlas y comprender su significado. 

 Leer es poder comprender un texto y extraer su significado

Las personas que leen con mayor regularidad, y adquieren lo que se conoce como hábito de lectura, son beneficiados con diversas ventajas. En primer lugar estas personas enriquecen su mundo interior, lo que les permite comprender el mundo externo de mejor manera. Alguien que lee adquiere más conocimientos e incrementa su capacidad comunicativa. Las palabras ayudan no sólo a comprender mejor las cosas sino también a hacernos comprender mejor con los otros.Por otro lado, leer ayuda a desarrollar nuestra capacidad de análisis y resolución de problemas, ya sea a nivel intelectual, práctico, en la vida diaria o laboral. Por otro lado, también es una opción de entretenimiento para aquellos que eligen la lectura de ficción en vez de realizar otras actividades como mirar televisión o navegar en Internet. Para que el proceso de lectura sea posible, varios aspectos se ponen en juego. La lectura como un proceso

En primer lugar la cuestión física, ya que es necesario el movimiento ocular y la fijación de la vista para leer. Además, se producen varios procesos internos dentro de nuestra mente. Cuando leemos, lo que hacemos es visualizar las palabras. Luego, se produce un proceso de fonación (consciente o no) en que la lectura pasa al habla y audición que pasa al oído. Finalmente, la cerebración entra en juego para que la información llegue a nuestro cerebro y podamos comprender.Aprender a leer es un proceso que comienza en una edad muy temprana, entre los cinco y seis años en la escuela primaria. Aprender a leer abre las puertas de la educación y la escritura que es otro proceso importantísimo en la formación intelectual de una persona. Lamentablemente, aún existen en el mundo millones de personas analfabetas que pierden acceso al conocimiento del mundo.Hay distintos tipos de lectura posible, que se adaptan a las necesidades del lector. Una lectura profunda requiere mayor concentración y atención, así como un trabajo intelectual más intenso. Una lectura rápida, por el contrario, busca detectar las partes más destacadas de un texto y no profundizar. Una lectura de repaso supone una lectura previa de análisis
, como puede ser una relectura de un texto ya leído
 
La lectura es un fenómeno humano complejo estudiado principalmente por un área de las neurociencias denominada psicología cognitiva, una especialidad científica interdisciplinaria que retoma importantes aportes tanto de las ciencias del cerebro y de la cognición como de la psicología en general para elaborar modelos científicos rigurosos que intentan entender y explicar lo que sucede en el cerebro durante el proceso de la lectura y otros fenómenos cognitivos similares. Podemos decir, primero que todo, que la lectura comienza cuando se da un estímulo sensitivo externo a través de uno solo o una conjunción de los sentidos, es decir, cuando por ejemplo se fija la mirada en un texto escrito. En tal caso, los ojos, que son dos órganos sensoriales capaces de percibir la luz en el entorno del individuo, envían tal percepción en forma de señales a través de los nervios ópticos hasta el cerebro, donde se entrecruzan en el quiasma óptico y llegan al lóbulo occipital que interpreta esas señales y “decide” que se trata de símbolos a los que luego el cerebro decodifica, les da identificación y les asigna significado. Hay que entender que la función única de los órganos sensoriales es la captación del estímulo exterior, que es enviado en forma de señales al sistema nervioso central y que solo adquiere significación cuando esas señales son procesadas por el cerebro, haciendo de la lectura un fenómeno eminentemente neurológico y psicológico, entendida esta como dar sentido a los símbolos. Es por esta razón que los diferentes medios de lectura, tanto el visual como por ejemplo utilizar el sistema braille, o aun escuchar una narración oral, parecen estimular las mismas zonas del cerebro en todos los seres humanos aquellas relacionadas con el lenguaje y la imaginación y evocar imágenes, ideas y sentimientos mediante mecanismos muy similares. Si bien la lectura parece ocurrir mayormente en la región de cerebro llamada lóbulo temporal (la principal zona del cerebro relacionada con el lenguaje), también tiene gran actividad en ella la corteza visual ubicada en el lóbulo occipital, que trabaja no solo para procesar información visual sino para recrear imágenes mentales; así como otras muchas regiones varias del cerebro esparcidas por toda la neocorteza cerebral, característica que la lectura comparte con otras funciones intelectuales superiores como la habilidad matemática y la conciencia y que es un signo de su complejidad neurológica.
Durante la lectura visual convencional se ha identificado el movimiento que realiza la mirada a través de las letras como «movimiento sacádico» o sacadas, es decir, un movimiento con la finalidad de obtener una imagen completa de algo, compensando el hecho de que la fóvea es estrecha y tiene un campo visual limitado. Un individuo “sano” (esto es, sin problemas que afecten su inteligencia ni su visión) tardará entre 200 y 300 milisegundos en promedio en fijar su atención a cada palabra en un texto y unos 69 milisegundos en saltar entre ellas. Esto es un promedio y no toma en cuenta aspectos como la comprensión lectora o el releer las palabras.
El primer científico en identificar las bases neuroanatómicas de la lectura y de los padecimientos que la afectan (alexia y dislexia) fue el francés Joseph Dejerine, quien escribió lo siguiente luego de realizar exámenes postmortem a varios pacientes diagnosticados con dislexia: «Siempre hay una lesión muy atrás en la región temporal posterior del hemisferio izquierdo, donde entran en contigüidad los lóbulos occipital y parietal». También demostró que la alexia dependía de una lesión unilateral en el hemisferio izquierdo del cerebro, iniciando así el estudio neurológico de este tipo de padecimientos.
    





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